El nido de serpientes

Cancún significa el nido de serpientes en el lenguaje Maya y es un lugar ubicado en la ciudad de Quintana Roo, en México. Su historia turística se remota a los 70s cuando el infratur (algo así como el ministerio de turismo en El Salvador) buscaba la forma de expandir el turismo en México mediante el desarrollo de lugares con alto potencial. Hoy, Cancún es un destino turístico importante y es de las playas más interesantes por visitar en Latinoamérica.

A continuación les describiré e ilustraré un poco mi viaje y mis impresiones para que tengan una referencia más personal sobre este destino.

El vuelo partió a las 8:00 a.m. un día Domingo en un vuelo directo operado por LACSA (TACA) que duró 1 hora 20 minutos.En el avión, los paisajes que pude apreciar de mi país fueron preciosos y fue una pena que al llegar a México el clima estaba bastante nublado y no haya podido sacar una aérea de las playas de Cancún.

En México nos estaba esperando un bus que nos trasladaría hacia el Hotel Royal Solaris que sería nuestro centro de operaciones para todo el desmadre que armaríamos en tierras aztecas.

El Hotel nos ofreció un paquete all inclusive y habitaciones tripes o dobles para el grupo de 37 personas que viajamos. Al principio, habíamos pactado que todos estaríamos en el mismo piso, pero al llegar al hotel cambiaron los términos de lo negociado y nos quedamos regados en todo el hotel. Sin embargo, yo me vi beneficiado del error del hotel puesto que mi habitación tenía terraza y una vista preciosa al estero de Cancún, así como refrigeradora y otras cositas que las demás no tenían :).

La comida del hotel, el servicio y la atención, excelentes. Los meseros en los restaurantes bastante amables, la gente de limpieza bastante prudentes, los bartenders alegres y dispuestos, etc. Aunque el plan original era pasar el menor tiempo posible en el hotel, el poco tiempo que pasamos ahí cargando pilas para seguir fregando fue de bastante calidad y lleno de entretenimiento con los juegos y dinámicas que ahí se proponen.

Lo malo del hotel es que esperábamos encontrar más gente de nuestra edad y poder hacer amigos, pero resultó ser un asilo en la playa. No es que tenga nada en contra de la gente mayor, es que cuando le pregunté a la agencia de viajes como era el hotel y al ver la página web me vendieron otra cosa.

La playa en Cancún es preciosa es color esmeralda/turquesa y la arena blanca y suave. Lástima que fuimos en una época con un clima un poco invernal y nos encontramos con el agua heladisima y con vientos un poco fuertes, pero de haber llegado en verano hubiéramos pasado en esa playa más tiempo. La mayor parte de nuestra estadía las banderas rojas de peligro contrastaron con el celeste del mar y el azul grisáceo del cielo.

En la zona hotelera se lleva un estilo de vida bastante Americanizado, la mayor parte de gente que vi en el hotel es estadounidense o canadiense y en toda mi estadía no tuve la oportunidad de ver algún mariachi o probar buena comida mexicana.

Para cambiar un poco de ambiente, también visitamos Playa el Carmen, a unas dos horas en transporte público de la zona hotelera y que es un concepto un poco distinto: más romántico, con pincelazos de cultura europea en bares y en la gente y con un poco más de juventud.

En esta playa se encuentra el mismo color precioso del agua, pero a la vez sorprende la comodidad con la que las nubes de gaviotas conviven con las personas. Es impresionante la cantidad de gaviotas flotando sobre la gente que se ven como si estuvieran colgando de hilos invisibles que caen el cielo.

Fuimos a un bar en la playa que se llama Mamita's donde nos atendieron súper bien y nos ubicaron en unas como colchonetas blancas que le dan un toque romántico a la playa.

Si pudiera resumirles algo de cada uno de los lugares les diría que lo mejor de Cancún es la vida nocturna, pero para ir a la playa disfrutar del mar no dejen de visitar playa el Carmen.

En una siguiente entrega les hablaré un poco sobre la vida nocturna en Cancún.