Hotel Royal Decameron Salinitas

miércoles, 12 de agosto de 2009

Descripción

Dicho complejo fue desarrollado con capital colombiano e inaugurado en el año 2005 convirtiéndose en el hotel de playa más grande de la costa salvadoreña, con una superficie de 270,000 m² y aproximadamente 1 kilómetro de playa y arena.

El hotel opera bajo el estilo todo incluido siguiendo el estándar que mantiene la cadena colombiana en países como Panamá, Jamaica, México y Colombia.

Con una inversión de más de $20 millones de dólares, esta se convirtió en la mayor del sector turístico de los últimos años, favoreciendo a la economía local y nacional llegando a ser uno de los resort más grandes de la costa pacífica central.El área de construcción significó un impacto positivo para el país ya que Decamerón utilizó diversos subcontratistas salvadoreños. Se le dio prioridad a la materia prima nacional y sus proveedores locales. De igual manera, los empresarios nacionales tienen una participación importante en la cadena de distribución de insumos tales como alimentos y bebidas.

La materia prima utilizada para la construcción del hotel, fue obtenida en su mayor parte de empresas salvadoreñas, lo cual significó una fuerte inyección de capital a la economía del país. Además, es una fuente de ingresos para el país puesto que atrae a 1600 turistas extranjeros mensualmente, generando así un crecimiento en las divisas. Además, varios empresarios nacionales tienen una participación importante en la cadena de distribución de insumos tales como alimentos y bebidas.

Atardecer en DecameronRoyal Decameron SalinitasAtardecer en DecameronEl ShowKarlita y Karen
Opinión Personal
Un lugar cómodo, bonito y para pasar unas vacaciones comparables a las que pasaríamos en otros países.

Las habitaciones son grandes con TV/Cable, A/C y otras comodidades. No tienen nada que envidiarle a un hotel y para ser un lugar donde uno tiene tanto por disfrutar afuera, demasiadas comodidades para las pocas horas que se supone que alguien debería dedicar encerrado en el cuarto, a menos que la visita sea en pareja ;).

La comida es de buen sabor y tienen un par de restaurantes de acceso mediante reservación previa que tienen buenos platillos: El Pastafarí (Comida Italiana) y el Maya Grill (Carnes). Antes el Bambú (Mariscos) erá bueno, pero la ultima vez que lo visité la calidad de sus platillos había caido notablemente así como su tamaño. Los snacks son abundantes y desde hace unos meses ya no solo ofrecen Hamburguesas y Hot Dogs sino tambien pizza, pero son un poco tacaños con ella.

La música en la discoteca es variada pero poco alegre para jóvenes entre 18-25 años. En lo personal, no me gusta la música que ponen pero considero que al ser para un mercado bastante diverso tratan de equilibrarlo con un par de canciones de cada genero y es una decisión razonable. La discoteca creo que se les está quedado pequeña, es imposible pedir un trago recientemente y el calor es insoportable.

Los licores que dan son de baja calidad, siendo lo mejorcito la cerveza puesto que pasaron de Regia a Pilsener. La calidad de los cigarros ha mejorado ya que de Viceroy a Pall Mall hay un gran abismo y espero que algún día tengan Marlboro.

Por las noches hay shows para niños y adultos. Los de niños suelen ser bastante divertidos para ellos y los de adultos son bastante inconsistentes, a veces son buenisimos y divertidos, otras rayan lo vulgar y lo ofensivo con algunos visitantes y en otras improvisados y aburrados. En mi última visita, el show fue en el salón de conferencias y fue bastante dinámico y divertido, esto puede ser porque haya sido el día Viernes en la semana de vacaciones de Agosto, pero esperaría al regresar de nuevo que la calidad del show se mantenga.

Por el día hay una gran cantidad de actividades por realizar, desde jugar tennis o andar por bicicleta hasta recibir un masaje (pago adicional) o andar en Kayak. Durante el día no hay motivo ni justificación de aburrirse, partidos de football, de volleyball, bar con buen ambiente, snacks, piscinas amplias y con agua caliente, etc.

La calidad del servicio y el trato al socio deja mucho que desear. Me sentía mejor atendido cuando aún no era socio que ahora que gozo de tal condición y una critica fuerte que tengo que hacer es que he llamado queriendo hacer una reservación como particular y me la han aprobado mientras que como socio me han dicho que el hotel está lleno. Comprendo que traten de maximizar utilidades, pero la verdad es que el socio no está pagando menos que el particular debido a que únicamente compró por adelantado su paquete y se queda devengandolo con la esperanza de tener ciertos beneficios por haber pagado por adelantado.

Creo que los más inconformes con el hotel somos los socios, por sus políticas de reservaciones y que dificilmente otorgan un cuarto en buena ubicación. Por lo demás, es un lugar precioso y de lo mejorcito para disfrutar entre familiares o amigos aquí en El Salvador.


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